Motagua iniciará su participación en el Grupo A con la intención de comenzar de manera positiva esta nueva fase del torneo, apostando a trasladar su experiencia a un buen debut. El equipo dirigido por Javier López terminó tercero en la fase regular con 35 puntos, producto de diez victorias, cinco empates y cinco derrotas, un recorrido marcado por cierta irregularidad en el rendimiento. No obstante, el conjunto azul cerró la etapa clasificatoria con una actuación muy sólida al imponerse por un contundente 7-1 ante Juticalpa como visitante, un resultado que elevó notablemente la confianza del plantel y lo motiva de cara a este tramo decisivo de la competición.
Real España llega a este compromiso bajo una fuerte presión tras debutar en los triangulares con una derrota por 1-0 frente a Olimpia, en un partido decidido por un tanto de Jorge Benguché que dejó al equipo de Jeaustin Campos sin premio pese a haber mostrado pasajes positivos de juego. Con la obligación de reaccionar de inmediato, el conjunto aurinegro se enfrenta a un rival que le ha resultado complicado a lo largo del torneo, ya que cayó en ambos enfrentamientos de la fase regular, 3-2 como visitante y 2-1 en condición de local. En este contexto, conseguir puntos en Tegucigalpa se vuelve una necesidad urgente para Real España si pretende mantenerse con opciones reales en la pelea por alcanzar la final.
